sábado, 3 de mayo de 2008

Que le vamos a hacer, acontece













La verdad sopló tanto o más que la semana pasada. Unos 15kts del SE, muy establecido y sin rachas, con una ola corta y reducida que, pese a todo, mojó bastante. El pampero salió varias veces, como ya es costumbre; la segunda salida se hizo con una mano de rizos, aunque gran parte de la navegación se hizo dentro de la bahía. El tercer turno se hizo completamente en el interior de la bahía, y el cuarto también. El espacio relativamente reducido y arrachado de la bahía es bastante complejo por los bordes cortos y el tráfico de embarcaciones pero no hubo mayores inconvenientes. Los instructores estamos realmente muy contentos porque este año los alumnos vienen muy bien, esperemos que sigan así...

Hoy armamos sólo un 470 ya que había pocos alumnos viejos para tripularlos. En la primera salida Manuela recuperó rápidamente el gusto por el trapecio; con el barco planeando constantemente, el GPS llegó a marcar una vez más 11.4kts. En la segunda salida Leo y quien les habla buscamos romper el récord--sin éxito, lamentablemente--pero sostuvimos unos decentes 7.8kts de velocidad promedio total. La tercera salida, con el Dr. Malnatti al timón y su servidor en el trapecio, terminó con consecuencias inesperadas--y no muy felices.

En primer lugar se volvió a cortar el pasador del timón que sujeta la pala al codaste, lo cual en sí no es bueno. Si no fuera por el cabo que lo hace firme, la pala estaría todavía flotando en el Río de la Plata (y nosotros también). Y en segundo lugar, en medio de una escorada que dejó el 470 prácticamente acostado, quien les escribe se fue inevitablemente al joraca, cayendo no en el agua como suele pasar, sino sobre el estanco de sotavento--y literalmente "metí la pata". (a la izquierda, el resultado). Tremendo buraco se hizo, así que el 470 queda parado por reparaciones... un buen momento para que los alumnos viejos empiecen a pulir sus habilidades de trabajo con la fibra y la resina. Acontece, digamos.

En otros temas, el mate como siempre estuvo presente--y viene muy bien para templar el espíritu despues de c*garse mojando--y el Sr. Bruzone hizo patria con unas Pepas que muchos se perdieron. Voy a tratar de volver a llevar medialunas y vigilantes, pero no les prometo nada... en la bicicleta se complica llevar dos docenas, vieron...

Bueh, así que al final de esta edición el pampero sigue fenomenal como de costumbre pero tenemos una baja temporaria--cortesía de este cronista. A no preocuparse que todavía tenemos el otro 470 para romper (toco madera)...



[Video de los momentos previos al siniestro]

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